Opiniones Cuerdas eléctrica Optima Gold Strings 09-42

Aquí están las herederas de las míticas cuerdas Maxima, con un baño de oro de 24K que garantiza una gran duración Cuerdas Eléctrica Optima Gold Strings 09-42 Aquí están las herederas de las míticas cuerdas Maxima. Las Maxima estaban fabricadas originalmente en Alemania basándose en una producción muy pequeña y selecta empleando los mejores materiales para satisfacer las demandas de los músicos más exigentes y más pudientes, de ahí que fueran muy dificiles de encontrar. Muy populares en los 60 gracias a bandas como The Beatles y después de años fiuera de producción, Optima ha empezado de nuevo a fabricarlas siguiendo las especificaciones originales y destacando en lo que fueron pioneras: las primeras cuerdas de gran duración. Por algo se llamaban Maxima... No en vano no hace mucho en subastas se pagaban por ellas sumas desorbitantes para unas cuerdas y eran muy codiciadas por muchos usuarios de Rickenbacker. Estas cuerdas presentan la peculiaridad de emplear un hilo interno seleccionado de máxima calidad (la mayoría de fabricantes usa acero sueco, más económico pero menos resistente) que es bañado en uno de los metales más preciados: oro de 24K. Esta combinación única que alea el mejor acero con el oro garantiza una protección completa frente a la corrosión garantizando una duración extraordinaria, gran sustain, una entonación perfecta y un tono brillante. Lógicamente su color es dorado y proporcionará un aspecto impresionante a tu instrumento. Este juego 09-42 está personalizado con la imagen de Brian May, músico, activista, astrofísico y uno de los estandartes de la guitarra moderna que elige Optima para sus guitarras. Si no te gusta Brian May, olvida todo lo que tenga que ver con él y piensa que lo verdaderamente importante está en el interior de este gran juego. Calibres: 09-11-16-24-32-42 Advertencia: Optima suele cambiar el aspecto exterior de sus juegos de cuerdas por lo que no te preocupes si el diseño varía de uvas a peras. Con esto queremos decir que quizás pase un tiempo y ya no te encuentres con el rostro de Brian May. Lo importante es que las cuerdas siguen siendo las mismas.